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Mostrando entradas de noviembre, 2017

Silencios

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¡Hola de nuevo, lectores! Llegó la hora de emprender un nuevo proyecto literario , porque estaba cansada de no tener tiempo para escribir y que, cuando lo tenía, no sabía a qué dedicarlo y acababa haciendo cualquier otra cosa (no sé si también os ha pasado). El caso es que me planteé empezar un nuevo libro, solo para mí. Es decir, escribir por escribir, porque me gusta, y hacerlo por y para mí (eso no quita que, después de acabarlo, pueda decidir compartirlo :D). Así que, lo que voy a hacer es dejarme llevar por la fantasía y por el momento, e intentar crear una historia coherente a partir de eso, sin tener nada (absolutamente nada) planeado de antemano. A ver qué sale :). Aquí os dejo el principio:  Y vi sus ojos, inalcanzables, pasando sobre los míos sin verme. Un pinchazo en mi corazón y un latido fuerte, anhelante. Todo en mí me decía que me acercase a él, que rompiese esa barrera invisible que parecía haberse creado en el primer momento en que me acobardé, e

Una mirada diferente

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¡Hola personitas del Universo! Hoy os traigo un relatito que escribí hace algo más de un año. El original es en gallego, así que aquí lo tenéis tal cual lo escribí en su momento. Debajo encontraréis mi traducción al castellano ^^. ¿Os animáis a leer los dos? ➽➽➽ UNHA MIRADA DIFERENTE Todos os días o mesmo, levantarse para volverse deitar de noite. A súa vida era sinxela, unha coma todas as demais. Só que un día, na súa habitual calma, empezou a ser consciente da soidade que o rodeaba. Nunca lle importara non relacionarse demasiado coa xente, non o precisara nin se sentira apartado. Pero ese día comezou a fixarse nas persoas do seu arredor. Observounas durante un tempo. Cruzouse con homes, mulleres, anciáns e nenos, de ollos verdes, azuis, marróns, grises, máis claros ou máis escuros. Eran ollos aparentemente fermosos, pero que ben mirados, eran aterradores. Porque cando se pousaban nel, convertíanse en simples olladas que miraban cara a el, pero que en realidade non o

... desgarra la noche y rompe la tierra

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¡Hola de nuevo, queridísimos lectores! ¿Recordáis la historia que os traje la semana pasada, el mito de  Susanoo ? Pues bien, hoy me he decidido a escribir la segunda parte, sobre su exilio en el mundo de los humanos. Espero que os guste :). El rayo se había extinguido, apagado por la ira de ochocientos dioses. Su último estruendo se había perdido en el reino de los mortales. De pronto me encontraba en el mundo que había sido arrasado por tantas de mis tormentas, por cada arrebato de ira que había sentido. Mi pecado: traer la oscuridad, apartando por siempre la luz de Amaterasu. Y mi castigo había sido el exilio, condenado a vagar por siempre entre los mortales. La tierra se había sumido en penumbra, y entre la oscuridad pude ver decenas de pequeñas casas, viejas y semiderruidas. Una triste aldea azotada por un gran mal. Pero en aquel entonces no me importó; lo único a lo que presté atención fue el dolor y la rabia que me consumían. Tal era mi desconsuelo que tar